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La automatización y la digitalización son procesos en los que la tecnología se pone al servicio de los usuarios para hacer la vida más cómoda. La identificación por huella dactilar tiene su origen en la Antropología. Aunque a nivel práctico ha sido la policía la que ha desarrollado un sistema, que hoy cuenta con múltiples aplicaciones industriales para uso cotidiano: desde la domótica de nuestra casa al acceso a la oficina. Y que la industria del automóvil, de la mano de Hyundai, quiere convertir en toda una experiencia de cliente. Segura frente a impostores. Pero débil en la ciberseguridad de los bancos de datos. Identificación por huella dactilar, la llave del siglo XXI.

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Huella dactilar y automoción: más cerca del “coche fantástico”

El futuro ha llegado y pasa por vehículos inteligentes. En mayor o menor medida, nuestros coches cada día avanzan hacia máquinas de absoluta precisión. Donde la seguridad en carretera y la fiabilidad de respuesta de estas obras de ingeniería, se acercan cada vez más al comportamiento humano. Un humano perfecto en ejecución. En el que el cansancio no nubla la toma de decisiones. Ni el estado de ánimo.

Identificación por huella dactilar como llave: Hyundai a la cabeza

La compañía coreana quiere ser pionera en implantación a nivel usuario de tecnología de sistema de identificación por huella dactilar en sus vehículos. Se trata de un paso más en un sistema inteligente donde la huella sirve tanto para abrir el coche como para ponerlo en marcha.

La idea es que, además, cuente con otras prestaciones automatizadas por las que el vehículo puede adaptarse a las preferencias de cada conductor. Previamente se ha hecho un registro en su sistema tanto de la huella como de cuestiones como: la posición de los espejos laterales o el asiento.

Bentley lo incorporó primero

Bentley ya coqueteó con la identificación por huella dactilar. Incorporó esta tecnología en su modelo Bentley Bentayga. Sin embargo, su precio prohibitivo para muchos, ha complicado su distribución. Entre sus prestaciones incluye una “caja fuerte” que se abre con un sensor de identificación por huella dactilar.

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¿Dónde se emplea la tecnología de identificación por huella dactilar?

Seguro que te has dado cuenta que en algunas oficinas de servicios públicos los funcionarios tienen en su mesa un sensor biométrico. La mayoría de ellos son sensores para la mano y los dedos.

Las empresas

Muchas empresas han empezado a utilizar sensores de huella dactilar y otros sensores biométricos, porque supone: una manera de identificar a alguien de forma infalible, sencilla y barata.

•    Para el acceso al edificio o a zonas restringidas (como áreas de alta seguridad o laboratorios).

•    Activación de ordenadores o máquinas.

Los individuos

Cada día son más las personas que aprovechan las ventajas que la identificación por huella dactilar aporta porque es cómoda y práctica. La sencillez para acceder a nuestros aparatos electrónicos como: nuestro teléfono móvil o nuestra Tablet. O la activación de nuestra tarjeta inteligente para realizar un pago electrónico.

Y (ahora) el arranque del coche. Libera a la persona de llevar algo, como una llave. O memorizarlo, como una contraseña o patrón.

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Han incorporado esta tecnología de identificación por huella dactilar:

  • Teléfonos móviles y ordenadores: Apple, Samsung, Xiaomi, Huawei…
  • Coches: como  Bentley y Hyundai
  • Domótica: como el acceso al domicilio y desactivación de alarma…

Aplicaciones de los sensores biométricos en la industria

En una industria, mantener ciertos procedimientos, fórmulas o modelos en secreto forma parte de la estrategia. En la era de la Transformación Digital donde todo camina hacia la conexión total incorporar sistemas fiables de seguridad, es fundamental. Y los sensores biométricos cumplen con los estándares de seguridad más altos en la actualidad.

Cómo funciona la identificación por huella dactilar

Todo sensor de reconocimiento de huella dactilar cuenta con un lector que funciona como un escáner. Un dispositivo sensible al tacto, con capacidad para leer la impresión que deja nuestro dedo cuando lo apoyamos sobre él.

Recoge la imagen que luego es procesada a través de un sistema de identificación biométrico. Un algoritmo analiza las características que recoge el sensor. Y las compara con los registros de la huella que se han hecho previamente en la base de datos. Para proceder a una identificación positiva.

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Diferencias entre lector de huella dactilar y sensor biométrico

Un sensor biométrico permite el reconocimiento de personas a través de datos personales e intransferibles como son: las características fisiológicas y las conductas que tenemos.

Un lector de huella dactilar es un tipo de sensor biométrico. Especializado en la interpretación de las líneas de nuestras yemas. Los hay incluso que leen toda la mano.

Biometría fisiológica

Mide rasgos físicos propios. No solo la identificación por huella dactilar, también recogen otros datos como la temperatura.

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  • Iris de los ojos.
  • Geometría de la mano.
  • Reconocimiento de retina.
  • Sistema vascular.

Biometría del comportamiento

Mide la acción. Es decir, nuestros movimientos ya que tienen una modulación personal. Es el caso de la voz o la firma que hacemos sobre una pantalla digital (incluyendo no solo el trazado sino también la presión sobre la pantalla). Y hay sensores capaces también de identificar nuestra forma de teclear cuando escribimos a ordenador.

  • Firma.
  • Escrito en papel.
  • Escritura de teclado.
  • Voz.
  • Forma de caminar.

La firma digital se utiliza a diario. Algunas compañías de tarjetas la usan como método para consentir o enviar la orden de pago a un establecimiento. Cada vez que invitas a un amigo a comer en un restaurante o te compras ropa la usas.

Millones de personas cuentan también con el certificado de firma digital oficial en sus ordenadores. Con él, acreditan su identidad para acceder a servicios y documentación personal de las Administraciones Públicas.

Nace en la Antropología.

El estudio de las huellas dactilares como identificador se desarrolla dentro del campo de la Antropología. Se trataba de establecer las diferencias entre grupos de personas por sus características dactilares. Por ejemplo, entre grupos étnicos.

Policías en el siglo XIX: el primer uso práctico.

La identificación por huella dactilar comienza a utilizarse como método con el que determinar la identidad de personas que habían cometido un delito.

Se reveló como un sistema práctico y certero que, sin embargo, contaba con algunos problemas en cuanto a rapidez y comodidad debido al volumen de datos.

El FBI automatiza la identificación por huella dactilar en los 60.

El volumen de datos era tan grande (el antecesor del Big Data) que se ideó un programa informático para comparar huellas de forma automática y sistematizada en estos enormes bancos de datos.

  • En esos mismos años las policías de Francia, Gran Bretaña y Japón trabajan en ello.
  • Después, se creó AFIS. Que llega hasta nuestros días y es el programa de cruce de datos americano.
  • Existen otros sistemas nacionales. Y, a nivel internacional, es SAID el usado por INTERPOL.

¿Es seguro usar mi huella dactilar como llave?

Sí. Para despejar tus dudas hemos querido saber qué opina la Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL), integrada por 194 países. Sabiendo que una huella dactilar cuenta con rasgos característicos que la definen como: patrones, minutas y poros.

INTERPOL considera que, “no hay dos personas con las mismas huellas dactilares; ni siquiera los gemelos homocigóticos. Las huellas dactilares no cambian nunca, ni con la edad, a menos que la capa profunda o basal se destruya o se modifique intencionadamente por medio de cirugía plástica”.

¿Es posible clonar una huella?

No es tan fácil como parece. Una copia perfecta de las huellas pasaría por la tecnología de impresión 3D. Pero los lectores biométricos son cada vez más complejos. Ejemplo de ello es el de Hyundai:

 “La tecnología de huellas dactilares previene eficientemente las huellas dactilares falsificadas, gracias al reconocimiento de capacitancia, que detecta los diferenciales en el nivel de electricidad de varias partes de la punta del dedo. Esta tecnología es cinco veces más efectiva que las llaves de vehículos convencionales, incluidas las teclas inteligentes.”

Ciberseguridad de los bancos de datos: la verdadera amenaza

El uso de huellas dactilares, así como otros datos biométricos, está considerado uno de los sistemas más seguro que existen para proteger los dispositivos electrónicos, el acceso a recintos o la identificación de personas, en general. Siendo un sistema tremendamente efectivo.

Los problemas relacionados con la seguridad tienen según los expertos, más relación con protección de datos. Es decir, con la seguridad de los bancos de datos en las empresas que los gestionan.

1. Hacker. Que acceda a la base de datos de la compañía para obtener las huellas de empleados o clientes.

2. Compañía que gestiona los bancos de datos: que los “venda”, ceda o comparta con terceros.

Comodidad/Intimidad: las dos caras de tus huellas

Que la identificación por huella dactilar es precisa y práctica, no hay duda. Pero, como pasa con el resto de datos biométricos, trasciende a un espacio que va más allá de lo físico. Donde los límites de uso deben estar muy claros.

Son los datos más personales que puede tener un individuo. Y son utilizados de forma “pública” en el momento en el que forman parte de un banco de datos de una empresa. Una cuestión que merece la pena tener en cuenta cuando cedemos nuestros datos de forma sistemática para cualquier nimiedad. Son personales pero dejan de ser íntimos.

Datos especialmente protegidos

Las huellas dactilares y resto de datos biométricos son un tipo de datos personales especialmente sensibles que, en principio, no pueden ser tratados por las empresas según el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la UE.

Son los “datos genéticos, biométricos o sanitarios, salvo en casos específicos (por ejemplo, cuando se da un consentimiento explícito o cuando el tratamiento es necesario por razones de interés público esencial sobre la base del Derecho nacional o de la UE)”, según indica la Comisión Europea.

Esto es obligatorio:

  • El RGPD debe ser respetado por empresas que operan en la UE.
  • Y por aquellas que, teniendo su sede en el extranjero, cuentan con datos de clientes europeos. Serviría como ejemplo: un cliente español de Hyundai que adquiere un Santa Fe con la tecnología de identificación por huella dactilar incorporada.

Consentimiento y control

Las empresas que manejan este tipo de datos (por ejemplo, para el acceso de sus empleados a las instalaciones) deben cumplir con 3 fases de consentimiento y control de datos debido a su especial relevancia.

  • Recabar el consentimiento explícito de los trabajadores en un documento donde se especifique claramente con qué finalidad se van a obtener esos datos biométricos
  • Realizar una evaluación de impacto sobre estos datos
  • Llevar a cabo el registro de actividades de tratamiento

La importancia del consentimiento

Cuando una persona consienta el tratamiento de sus datos biométricos (como el registro de sus huellas dactilares) solo se podrán tratar para los fines para los que haya dado su consentimiento. También debe ofrecérsele la posibilidad de retirarlo.

Reglamento General de Protección de Datos (RGPD):

  • “El objetivo de estas normas es garantizar que el interesado comprenda lo que está consintiendo”
  • “El consentimiento debe darse de manera libre, específica, informada e inequívoca, mediante una solicitud presentada en un lenguaje claro y sencillo”
  • “Se expresará mediante un acto afirmativo, como marcar una casilla online o firmar un formulario”

La tecnología nos hace la vida fácil. La identificación por huella dactilar como llave es cómodo y práctico. Pero conviene recordar qué tipo de datos personales cede el usuario a un banco de datos gestionado por empresas con intereses comerciales.

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